Julio Cortázar
Poeta y Escritor Argentino
(1914 - 1984)
Dadora de playas
De tus muchísimos amantes guardas destrezas,
inesperados sesgos,
caprichos repentinos y falsas negativas que una sonrisa desmantela,
quizá la intermitencia de unos ojos hincados en el goce
...
y bruscamente, sin aviso,
esa obstinada negativa a abrir los párpados,
no sé, cosas esquivas,
cambios que remontan a gustos superpuestos,
a músicas distintas, a tantos bares donde diferentes manos te leyeron
y donde diferentes nombres entraron en tu alerta indiferencia
de pasajera, de indescifrable francotiradora.
A mi vez dejaré en tu piel la huella de estas ceremonias,
de hábitos definidos, de maneras y de ángulos,
oh arena donde tantos arquitectos levantaron sus torres y sus puentes,
para que el viento las llevara mientras tú te volvías al malecón o al bar;
virgen a tu manera,
la manera mejor y más hermosa de ser virgen;
dadora de las playas para los nuevos juegos.
De tus muchísimos amantes guardas destrezas,
inesperados sesgos,
caprichos repentinos y falsas negativas que una sonrisa desmantela,
quizá la intermitencia de unos ojos hincados en el goce
...
y bruscamente, sin aviso,
esa obstinada negativa a abrir los párpados,
no sé, cosas esquivas,
cambios que remontan a gustos superpuestos,
a músicas distintas, a tantos bares donde diferentes manos te leyeron
y donde diferentes nombres entraron en tu alerta indiferencia
de pasajera, de indescifrable francotiradora.
A mi vez dejaré en tu piel la huella de estas ceremonias,
de hábitos definidos, de maneras y de ángulos,
oh arena donde tantos arquitectos levantaron sus torres y sus puentes,
para que el viento las llevara mientras tú te volvías al malecón o al bar;
virgen a tu manera,
la manera mejor y más hermosa de ser virgen;
dadora de las playas para los nuevos juegos.
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